“Los partidos y algunos grupos deben reconsiderar presentar candidatos a primarias legislativas o de alcaldes por el mero hecho y capricho de llenar planchas electorales."
Editorial - LA TRIBUNA de El Ideal PR
A medida que Puerto Rico se prepara para las próximas elecciones, la calidad de los candidatos que sean electos se levanta como un factor determinante en la dirección que tomará nuestra isla. En este momento clave de nuestra historia, es necesario que la población reflexione sobre la trascendencia de seleccionar líderes no solo competentes, sino profundamente comprometidos con el bienestar de nuestra gente.
¡La Representación Importa! Puerto Rico es un mosaico de voces diversas, cada una con su historia y perspectiva única. La elección de candidatos de calidad es imperativa, estos deben comprender las complejidades de nuestro sistema político, cultura y, además, que tengan la capacidad de abogar y discernir por las mejores políticas que puedan ayudar a los más vulnerables y a que la isla prospere. Es imperativo la selección de candidatos preparados y listos para trabajar comprometidos con el bienestar de nuestra gente.
Basta ver una lista de ‘líderes’, para identificar una de las situaciones que ha llevado a la isla a los serios problemas fiscales y de administración que atraviesa.
El primer filtro para elegir candidatos de calidad son los propios partidos y cuatrienio tras cuatrienio se ha evidenciado que los llamados “Comités de Cualificación de Candidatos” han fallado crasamente. El segundo filtro lo son las primarias de ley y para que estas tengan un éxito positivo para la isla los votantes tienen que hacer su parte y estar informados en la visión y en las propuestas de los candidatos. Por último, la elección general es la principal oportunidad democrática del pueblo para elegir a los líderes, a la visión y proyectos que quieren adelantar.
En la isla, se avecinan momentos de tomar decisiones decisivas, en tiempos de turbulencia. La historia reciente de Puerto Rico está marcada por una gran incertidumbre económica, de desastres naturales y un panorama político de constante cambio. Los candidatos de calidad deben poseer la visión y la determinación necesarias para navegar estas aguas tan complejas, ya sea en la formulación de proyectos de ley, propuestas o servicio a la comunidad, estas respuestas a desastres o en la implementación de políticas económicas sólidas. Su liderazgo será fundamental para la estabilidad y un progreso definitivo.
Las primarias siempre presentan una terna de candidatos para cada puesto político por el afán electoral de lograr votos. Lo importante es reconocer que a muchas posiciones ya hay excelentes candidatos cualificados y listos para servir por los mejores intereses de la isla. Los partidos y algunos grupos deben reconsiderar presentar candidatos a primarias legislativas o de alcaldes por el mero hecho y capricho de llenar planchas electorales. Puerto Rico merece un gobierno en el cual pueda confiar, el pueblo no se merece continuar bajo los efectos del ‘Síndrome de Estocolmo’, más debe sentirse finalmente confiado en que aquellos oficiales electos que han servido bien continuarán trabajando y tomarán siempre las decisiones adecuadas para Puerto Rico.
Como votantes, todos tienen el poder de dar forma al destino de Puerto Rico. En estas próximas elecciones, se debe priorizar la calidad sobre la prisa, caravanas y las guaguas tumba cocos. Examinemos a los candidatos, no solo por sus afiliaciones políticas, sino por sus calificaciones, valores y dedicación al bienestar y desarrollo de Puerto Rico. Las decisiones en las urnas son finales, por lo cual el deber de todos es tomar decisiones informadas. Debemos sentar la base para un Puerto Rico más fuerte, uno que florezca frente a la adversidad y abrace un futuro de prosperidad.